El LED rojo, que opera principalmente en las longitudes de onda de600 a 700 nm, es reconocido por sus propiedades antienvejecimiento, gracias a su acción dirigida sobre las capas superficiales de la piel.
Esta luz roja estimula la producción de colágeno y elastina, dos componentes clave en el mantenimiento de la elasticidad y firmeza de la piel, reduciendo así visiblemente las líneas finas y las arrugas. Al fomentar la regeneración celular, el LED rojo ayuda a reparar los daños cutáneos causados por el envejecimiento y las agresiones externas, dando como resultado una piel revitalizada y rejuvenecida. Además, esta tecnología mejora la circulación sanguínea en la superficie de la piel, proporcionando una mejor oxigenación y nutrición a las células cutáneas, lo que contribuye a un cutis más uniforme y radiante.
El efecto antienvejecimiento del LED rojo lo convierte en una solución muy solicitada por quienes desean invertir de forma natural los signos del envejecimiento, ofreciendo una piel visiblemente más joven, sin recurrir a tratamientos invasivos.
- Favorece la renovación celular
- Aumenta la elasticidad y firmeza de la piel
- Reduce cicatrices y estrías